Las zanahorias son uno de los alimentos más ricos en nutrientes que nos da la naturaleza. Su vistoso color ya indica la presencia de gran cantidad de antioxidantes, que todos conocemos como carotenos, sustancias que son capaces de simular la acción que tiene la vitamina A en nuestro organismo cuando los niveles de ésta son bajos.
Indudablemente, cualquier alimento rico en antioxidantes será útil para prevenir la aparición de células tumorales, pero hoy vengo a corrobar los efectos anticancerígenos de las zanahorias, gracias a un metanálisis donde se han recogido varias investigaciones en las que se relacionan los tumores y cánceres de estómago en general con el consumo de zanahorias.
¿Cuántas zanahorias hay que comer?
Al menos una por día y que sea cruda por supuesto. La zanahoria no sólo es rica en antioxidantes, también en fibra y potasio, lo que la convierten en un ingrediente fundamental para ensaladas, purés y platos ricos en proteínas.
El cáncer de estómago es uno de los más agresivos, siendo el tercero que causa más muertes en el mundo, las cifras de fallecidos se incrementan cada año de manera considerable, principalmente por la alimentación moderna que nos amenaza día tras día. El consumo de zanahorias, según el estudio, reduce el riesgo de sufrir cáncer gástrico en un 26 por ciento aproximadamente. Lástima que no se indiquen la cantidad exacta de zanahorias que hay que consumir, pero investigando, he descubierto que hay estudios como éste, donde también se ha relacionado el consumo de zanahorias con una menor incidencia de cáncer de próstata, y con resultados muy significativos. En dicho estudio se aconseja una cantidad de unos 10 gramos, aproximadamente una zanahoria pequeña. No son comparables pero si orientativos.
Después de todo esto, se corrobora, como no, la importancia de incluir antioxidantes en nuestra alimentación de manera obligatoria si queremos librarnos de enfermedades indeseables como el cáncer. Aconsejo incluir zanahorias crudas a diario para aprovechar al máximo su riqueza en nutrientes, además ahora con el verano serán aliadas de nuestra piel, para protegernos de la sobreexposición a la radiación solar.
¡A seguid san@s, no lo olvidéis!
