¿Es bueno entrenar en ayunas?

En este artículo compañer@s, quiero daros varias pautas sobre practicar ejercicio en ayunas, no con el estómago vacío. Me refiero exactamente a cuando nos levantamos de la cama por las mañanas.

Muchos amantes del fitness y de la musculación apuestan firmemente por realizar ejercicio en ayunas para potenciar la combustión de grasas y estimular la producción de testosterona, es muy cierto, pues justo cuando nos levantamos, nuestro cuerpo apenas cuenta con reservas energéticas de acción rápida (glucosa circulante y glucógeno), pero sí que tenemos reservas casi ilimitadas de grasa que serán utilizadas para conseguir energía.

Pues bien, no sólo por esa razón es aconsejable entrenar en ayunas, existen algunos aspectos que es importante tener en cuenta si queremos hacer ejercicio recién levantados, porque no siempre es bueno y os explicaré por que razón.

En primer lugar compañer@s, cuando nuestro cuerpo se encuentra en estado de ayuno, como por ejemplo por la mañana, contamos con muy poquitas reservas de glucógeno, teniendo en cuenta también las condiciones particulares de cada individuo y la ingesta de calorías del día anterior. Nuestro hígado es capaz de almacenar alrededor de unos 150 gramos de glucógeno en su interior, y nuestros músculos aproximadamente 100. Cuando dormimos, entramos en un proceso de reparación interna, nuestro organismo comienza a regenerar tejidos dañados y realiza tareas de desintoxicación, aunque nosotros no nos demos cuenta, y para todo esto se necesita bastante energía. La manera más rápida que tiene nuestro cuerpo de hacerlo es consiguiendo energía principalmente de nuestro hígado y nuestros músculos, cuando estas reservas se agotan, recurre evidentemente a los depósitos grasos, que prácticamente son ilimitados. Es fácil de comprobar, ya que cuando nos levantamos, normalmente solemos encontrarnos con un tono muscular disminuido y un poco desinflados, debido a lo que hemos comentado.

ejercicio

Ahora bien, sabiendo esto, tenemos que tener en cuenta 2 cosas, si queremos reducir de una manera más eficaz los depósitos grasos, lo ideal sería ejercitarnos por la mañana en ayunas, pero el ejercicio no deber ser intenso, más bien suave y moderado, y os explico por qué. Cuando realizamos esfuerzos intensos nuestro organismo utiliza toda la glucosa disponible, hasta un 80 por ciento de la reserva total, pues el 20 por ciento restante está guardado para nuestro cerebro. En ayunas, las reservas de glucógeno son muy pequeñas, por lo que si realizamos ejercicios anaeróbicos (cortos e intensos), como levantamiento de pesas, un spring o pliométricos podremos encontrarnos con problemas musculares (calambres, lesiones, impotencia, etc), es más, podemos desmayarnos, sentir un bajón de energía, conducir al organismo a una hipoglucemia severa, bajadas de tensión y pérdida del conocimiento, por lo que en ayunas compañeros, lo más recomendable es abstenerse de practicar deporte intenso. Dicho esto, os preguntaréis que si nuestro cuerpo cuenta con suficientes reservas de grasa, ¿por qué no se puede ir al gym en ayunas por ejemplo a hacer press de banca?. Nuestro cuerpo obtiene ATP también a través de la grasa, pero este proceso es más lento y es muy dependiente de la presencia de oxígeno, si nos dedicamos a entrenar intensamente, va a llegar un momento en que podemos entrar en un lapsus mecánico, con consecuencias graves. Incluso los más fuertes pueden notarlo, aunque algunos lo intenten y no sientan los problemas que acabo de decir, el rendimiento no será óptimo ni el adecuado ni mucho menos, lo que están consiguiendo es ir todo el tiempo al límite.

Entonces, ¿cuál es la mejor manera de hacer ejercicio en ayunas?. Lo más aconsejable y beneficioso es realizar ejercicios suaves y moderados, como pasear en bicicleta, eliptica, carrera continua, yoga, streching… De este modo, al ser esfuerzos suaves y prolongados, nuestro organismo utilizará las reservas de grasa y el oxígeno que le demos para obtener energía, una vez agotadas las reservas de glucógeno claro. No olvidéis que lo más preciado para nuestro organismo es la grasa, y es lo último a lo que va a recurrir, antes de eso, utilizará toda la energía que esté a su disposición. Este tema lo explicaré en otro post, porque muchos se piensan que por estar entrenando 15 minutos están quemando grasas, y nada de eso.

Espero que os sirva de ayuda compañer@s, ¡ánimo a los que os guste entrenar en ayunas!, pero recordad, suave y moderado.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.